lunes, 28 de diciembre de 2009

Con la música a esta parte... (II)

Reincidimos. He quemado nuevamente un par de ahorros que volvieron a colapsar, e invertí en algunas nuevas herramientas de sonido. Creo que ha mejorado un poco desde la última vez. Estoy caminando medio a ciegas por este camino de intentar hacer buenas grabaciones y voy descubriendo mis ignorancias del tema a medida que voy caminando... Mientras respire seguiré aprendiendo; es lo más lindo de todo esto.

Intenté con un tema de Serrat. Lucía, queridísima lectora, te lo dedico a tí... Espero que te guste. Es muy conocido y se llama precisamente "Lucía". Es un tema muy melancólico; es de una sencillez muy particular... El primer intento fue eliminado y el segundo me gustó. Tiene ruidos ambientes y demás... Si aparece algún perro ladrando o esas pequeñeces, es producto de que mi sala de grabación es un tanto precaria...jeje... Y por supuesto, aún falta mejorar algunas cosas más. Feliz año para todos...!

viernes, 25 de diciembre de 2009

El día después de la noche buena...

Bien, aquí estamos. Día 25, algo acalorado pero contento. En fecha de navidad y habiendo compartido una noche buena con mi familia. Voy a tratar de dibujar este preciso instante: estoy en casa de mis viejos algo aturdido por el ruido de las chicharras… Aquí abundan las chicharras, en mi casa hay un gran patio con árboles y en verano cantan hasta ponerse disfónicas… jeje… El calor húmedo de hoy es pesado y sofocante. Pero tengo ganas de escribir estas macanas después de todo.

Confieso no sentir demasiadas cosas espirituales en navidad, porque si bien mi familia es católica yo tengo una tendencia a un agnosticismo recalcitrante. Me molesta como en otros años esa forzada sensibilidad de los medios en querer pretender que la gente y el mundo se vuelva buena en una fecha. Me parece totalmente estúpido y me rebela bastante; me rebela incluso que el mundo siga esa ola de bondad de poco vuelo, absolutamente mentirosa... Creo que tiene cierto grado de patetismo.

Igual encontrarse con gente que hace un montón de tiempo no veo y que quiero mucho es para mí en si mismo una experiencia totalmente espiritual.

Hay gente que la pasa mal en estas navidades… Esa forzada necesidad de reunirse a más de uno no les sienta bien; en tales caso mi consejo es: no se junten… No hay obligación de hacerlo, por más que todo el mundo lo haga. Es más saludable hacer lo que uno realmente desea. No todo el mundo necesita de lo mismo.

Mi deseo para todos mis queridos y respetados lectores de este espacio, es que hayan tenido una buena navidad desde su lugar y desde su necesidad, respetando credos y formas de tomar estas fiestas…Si pudieron transitarla con espiritualidad (que ese creo que es el sentido de estas fiestas) en buena hora que así haya sido.

Y no tengo mucho más que contar ni que celebrar, celebro hoy simplemente poder haber estado con mi gente, que dentro de todo gocen de buena salud, y que a pesar de todo estemos juntos y unidos compartiendo un pan dulce, comida y un brindis.

Les dejo esta foto de noche buena que congeló el instante de mi estiramiento corpóreo, y también les dejo un gran abrazo.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Después del final

(Estos versos blancos fueron la antesala de una canción que compuse...)

Las lágrimas ya han caído
y se evaporaron en algún lugar.
El fuego se apagó
pero las cenizas aún vuelan en el aire.
Los caminos comienzan a bifurcarse
pero aún se insiste
con puentes torpemente construidos.
Aún cuando ya todo se dijo
queda la inercia del amor.
Mira sus pasos de reojo,
averigua con disimulada obsesión,
recuerda y no deja de recordar.
El alma se abriga con recuerdos
pero aún siente frío.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Simbolismos

Visito nuevamente el lugar. Estoy decidido a volver.

Entro y siento algo de olor a humedad y a encierro... Abro un poco las ventanas.
Hay tierra por todas partes, es curioso como el polvo se ensaña con los rincones olvidados.

Nunca supe por qué me fui; o no se por qué necesito volver. Quizás nunca me fui... Quizás solo salí a dar una vuelta porque no sabía que hacer aquí.

Coloco un sahumerio que cambie el olor de la humedad. Ordeno
y observo los extraños objetos que he dejado aquí. Recuerdo, observo, cavilo, medito y mascullo entre recuerdos.

El espacio nunca ha estado vacío. Siempre estuvo esperando pacientemente mi regreso... Quizás el espacio tiene un alma que no depende de mí.

Voy a colocar una flor recién cortada en el florero que está sobre la mesa, esperando que la musa vuelva y me salude con un beso en la mejilla. Ya quité el polvo del suelo y las telarañas del techo... La habitación de mi blog está de nuevo en condiciones.