miércoles, 24 de marzo de 2010

Camouflage

Me disfracé de oveja para que no vean mi condición de lobo
Me disfracé de lobo para que no vean mi condición de oveja
Me disfracé de convencional para que no noten mi excentricidad
Me disfracé de excéntrico para que no noten mi convencionalismo
Me disfracé de payaso para que no noten mi tristeza
Me disfracé de gladiador para que no vean mis debilidades
Hasta usé mi disfraz de pared pintada
para pasar inadvertido...

Y pude sobrevivir en la jungla humana...
Pero hoy,
desnudo y frente al espejo
no logro saber quien soy.

domingo, 14 de marzo de 2010

Sacudida brusca

La semana que pasó dejó de existir alguien que tenía 2 o 3 años más que yo. Era un viejo compañero de estudios... Habíamos compartido un par de años de estudios cuando yo cursaba las materias de mi carrera de sistemas. Era una persona bastante particular, un tanto pintoresco. A mí no me gustaban mucho sus modales un tanto rústicos y con cierta ausencia de sentido común...Estaba siempre al filo de algún desborde... Era un ser un tanto alocado, pero muy divertido y me siento seguro en decir que era buena gente.

Confieso que hacía un tiempo no lo veía, y nunca fui amigo de él pero teníamos buena relación y nos saludábamos cuando nos veíamos. Según me comentaron un infarto intempestivo lo llevó al otro lugar. Mi mayor respeto por el dolor de sus familiares y allegados...

Inevitablemente y frente a esta situación me viene un pensamiento que me dice “Perfectamente podría ser yo” aunque mi edad no sea la edad políticamente correcta para morir. La muerte me hace despertar y en algún punto me hace tomar conciencia de que estar vivo es posible que sea lo único realmente importante...

La muerte le cae de golpe a uno... Y muestra la relatividad de todas las cosas, la fragilidad de la vida.

Por eso creo que es tan importante tratar de vivir cada día como si fuera el último; y sé que no es una frase que a mí se me haya ocurrido... No es que intente ser original. Pero estas cosas a veces lo hacen a uno recapacitar sobre esta frase. La vida es un regalo que dura un rato... En realidad no sabemos cuanto, pero a veces es bueno no perder de vista de que dura un rato. Entonces cuando uno se para sobre estos pies comienza a reflexionar sobre cuales son las cosas reales que le dan sentido a nuestra vida. Y si estamos prestándole atención a lo que realmente deberíamos.

Quizás esta entrada trata de exorcizar mi propia cobardía ante la muerte.

jueves, 4 de marzo de 2010

Impresiones (I) - Vacaciones.

Que decir de estos días que han pasado tan rápido... Me traigo las voces y las imágenes de los amigos nuevos que estuvieron ese ratito. Es mucho más de lo que esperaba... Eso hizo al viaje tan gigantesco, tan lleno de emociones no demasiado manifestadas por mi inexpresividad aparente.

Me traigo las fotos de ese lugar tan especial, mezcla desértica y marítima...

Me traigo algunos momentos un tanto bizarros con gente en el Hostel que se alcoholiza y muestra sus pequeñas miserias de cabotaje... Una postal un tanto tragicómica.

Y quizás también me traigo una pequeña lágrima que rodó por un momento y se evaporó en un instante... Por ver irse este otro instante.

¿El agua no pasa dos veces por el cauce del río, no? Así dice más o menos el dicho... A veces uno quiere aferrar el instante entre las manos pero se diluye, como el agua.